El Amor No Tiene Edad
El Amor No Tiene Edad
El mundo grita con prejuicios,
nos señalan con sus dedos,
mas no entienden que en el pecho
late un fuego verdadero.
Dicen que los años cuentan,
que hay fronteras que cruzar,
pero el alma no tiene números
cuando empieza a suspirar.
Tu mirada es mi refugio,
tu risa, mi canción,
juntos somos tempestad
y a la vez quieta calma.
No importa si el tiempo apura
o si el cielo nos reclama,
nuestras manos ya están unidas
y en ellas llevamos el alma.
Critican lo que no entienden,
hablan sin conocer,
ignoran que en cada beso
nace un universo de fe.
No es locura, ni es pecado,
es ternura que florece,
dos almas que en silencio
un mismo idioma parecen.
¿Qué saben ellos del brillo
que en tus ojos veo arder?
¿O de cómo tu sonrisa
logra al mundo embellecer?
El amor no lleva cifras,
no se mide, no se ata,
es raíz que crece libre
en la tierra más sagrada.
Si la noche se hace fría
y las dudas quieren entrar,
recuerda que en mi pecho
solo existe el despertar.
Juntos somos como el viento
que no pide permiso al mar,
somos verso improvisado
que no deja de danzar.
No hay barrera, ni bandera,
ni reloj que nos detenga,
pues el corazón que sueña
nunca pide licencia.
Madurar no es solo años,
es saber escuchar,
es brindar sin condiciones
y en la tormenta abrazar.
Tú me enseñas a vivir
con la pureza de un niño,
yo te muestro que el camino
se recorre con cariño.
No hay distancia, ni palabras
que apaguen esta luz,
somos dos mitades unidas
por un lazo más allá de la cruz.
Si el mañana nos pregunta
por qué luchamos con valor,
diremos que el amor no tiene edad...
¡Solo tiene corazón!
—Luis Barreda/LAB
