#CarpeDiem #poesía
Tu forma de diábolo, de reloj de arena tu perfil, contra mi alma de león y mis dientes de marfil.
El mundo es infinitamente complejo… hay infinitos matices entre el bien y el mal, así como infinitos tonos entre el blanco y el negro.
El cuerpo que te ha tocado es el resultado de una lotería que no has jugado.
Déjame que te cuente el lado oscuro del mercado: venderse a uno mismo está muy bien pagado.
Antes de empezar, vigila tus deseos: hay que ser digno.
Cree en ti mismo: la creencia precede a la evidencia.
Más vale poco si es honesto y genuino que mucho y falso.
Pájaro nunca voló: le dijeron que no podía y se lo creyó.
¿Sin ganas de vivir? Vive sin ganas. Las ganas de vivir se ganan viviendo.
Larga es la historia, corta la conclusión: cada vez menos pelos en la lengua, más en el corazón.
Todos los días sonrío, o es que no lo ves: unos días al derecho, otros al revés.
Vístete de aire, de brisa y ven a verme.
Esta disputa —que el lector disfruta— de la zorra con las uvas me enseña
Del maestro más mordaz, siempre somos aprendiz: las lecciones vitales siempre dejan cicatriz.
Caído una vez, levantado otra vez más: así es la vida.