Mientras tanto, el eco de aquel beso inesperado resonaba en mi cabeza.
Tu forma de diábolo, de reloj de arena tu perfil, contra mi alma de león y mis dientes de marfil.
Voy a lanzarme a ver si existo: sin perdón, sin excusas, sin permiso.
La paciencia es la damisela que más se hace esperar y nunca termina por llegar
Pájaro nunca voló: le dijeron que no podría y se lo creyó.
Tu resultado, no el precio que has pagado, es lo que envidian.
Verte, que quiero verte. Porque sí, señores, cayó una hoja y dos y tres
Todo el mundo quiere ser inmortal, pero nadie se ha molestado en leer la letra pequeña: para ser inmortal
Plantamos flores para cubrir las grietas en el corazón.
Hijo, he aquí un hallazgo que te recomiendo no pasar de larg… ni olvidar: los humanos son bien lentos en dar… mas raudos cual rayo en recibir.
Tus demonios internos se van a eternizar hasta que veas, que para vencerlos, los hay que abrazar.
Desde que desperté, me dediqué a desear dibujarla despierta y desnuda: danzando decidida
Algunos se van a desilusionar, otros pensarán que es mentira, cuando les diga que lo que tiene valor en la vida no se puede patentar.
Pasa, pasa el tiempo pisando fuerte y pesa, —no sabéis cómo—
Tu sonrisa es un soplo de aire fresco. Un pliegue de origami que desorienta.