#haiku #poesía
La procesión va por dentro, no por teatro.
El mundo es infinitamente complejo… hay infinitos matices entre el bien y el mal, así como infinitos tonos entre el blanco y el negro.
Vamos con prisa para llegar más rápido a ninguna parte.
Fuimos los perfectos políglotas: yo te hablaba en cristiano, tú me callabas en francés.
Háblame de la fotogenia de la primavera de mis manos meciendo tus muslos y tus piernas
El cuerpo que te ha tocado es el resultado de una lotería que no has jugado.
Todos los días sonrío, o es que no lo ves: unos días al derecho, otros al revés.
Irrelevante: cuando nadas en el mar, la lluvia da igual.
Más vale poco si es honesto y genuino que mucho y falso.
La paciencia es la damisela que más se hace esperar y nunca termina por llegar
Larga es la historia, corta la conclusión: cada vez menos pelos en la lengua, más en el corazón.
Esta disputa —que el lector disfruta— de la zorra con las uvas me enseña
La vida, qué ironía tan bella, termina siendo lo que pensamos de ella.
Los ojos de Ella eran de esos que parecían poseer un pedacito de infinito
Cantar bajo la lluvia está sobrevalorado. Yo prefiero ser lluvia bailando en tu ventana: cantando en claqué
