#haiku #poesía
Voy a lanzarme a ver si existo: sin perdón, sin excusas, sin permiso.
Vamos con prisa para llegar más rápido a ninguna parte.
Quien no tiene memoria necesita cicatrices. Quien no tiene historia necesita tatuajes.
Desde que desperté, me dediqué a desear dibujarla despierta y desnuda: danzando decidida
Desde pequeñito crecí igualito que un camaleón: un ojo en el presente –que es buen… otro en el pasado –que fue mejor–.
La atracción de la luna siempre me pareció aterradoramente atractiva: como una buena mujer.
En efecto, yo –como cualquier elemento– lluevo lo que llevo por dentro. De hecho,
Vístete de aire, de brisa y ven a verme.
Algunos se van a desilusionar, otros pensarán que es mentira, cuando les diga que lo que tiene valor en la vida no se puede patentar.
Las aceras siguen siendo ilegibles libros de pies cuyas páginas se revuelven al son del insomnio
No se echa en falta nada que sobra: como una mariposa que vuela a la pata coja.
Hazlo aunque llueva, porque llueva o no llueva, no se hace solo.
Don nadie que se ha quedado con casi nadie desde que tiene memoria sabe que no hacen falta
¿Sin ganas de vivir? Vive sin ganas. Las ganas de vivir se ganan viviendo.
Llamad a Iberdrola, es urgente, la mayor cantidad de vatios y neón la dedican a marcas registradas y carbón para niños malos