Uno mendiga, muchos mirando el móvil: falta compasión.
Mientras tanto la gente intenta descubrir una forma de cubrir su carne desnuda que no se diluya
No se echa en falta nada que sobra: como una mariposa que vuela a la pata coja.
Las tiendas cierran, las cabezas pesan: hace frío para nada.
A lo mejor es bueno crearse una rutina de romper la rutina diaria y marearse en la noria. A lo mejor tenemos que ser fuertes
Curioso caso: el que vivió sin ganas las acabó encontrando. La historia acabó: Quien vivió sin ganas,
Nunca fue fácil enfrentarse a lo frágil: pero aquí estamos.
Hazlo aunque llueva, porque llueva o no llueva, no se hace solo.
Antes de empezar, vigila tus deseos: hay que ser digno.
Algunos se van a desilusionar, otros pensarán que es mentira, cuando les diga que lo que tiene valor en la vida no se puede patentar.
Las canas son sabiduría que se desborda.
Don nadie que se ha quedado con casi nadie desde que tiene memoria sabe que no hacen falta
Irrelevante: cuando nadas en el mar, la lluvia da igual.
En efecto, yo –como cualquier elemento– lluevo lo que llevo por dentro. De hecho,
La paciencia es la damisela que más se hace esperar y nunca termina por llegar