Día tras día.
#haiku #poesía
Vístete de aire, de brisa y ven a verme.
¿Sin ganas de vivir? Vive sin ganas. Las ganas de vivir se ganan viviendo.
Las tiendas cierran, las cabezas pesan: hace frío para nada.
Sin publicidad, sé una buena persona: he aquí el secreto.
Esta disputa —que el lector disfruta— de la zorra con las uvas me enseña
No soy ningún –ista ni practico ningún –ismo: sólo soy un artista que piensa por sí mismo.
Los ojos de Ella eran de esos que parecían poseer un pedacito de infinito
Hazlo o no lo hagas: no hay propósito alguno que te haga triunfar.
Desde pequeñito crecí igualito que un camaleón: un ojo en el presente –que es buen… otro en el pasado –que fue mejor–.
Tu forma de diábolo, de reloj de arena tu perfil, contra mi alma de león y mis dientes de marfil.
Detrás de esta sudadera desgastada y deshilachada guardo este acariciado, áspero y moribundo mundo. Detrás de esta cara de charlatán
Desde que desperté, me dediqué a desear dibujarla despierta y desnuda: danzando decidida
Algunos se van a desilusionar, otros pensarán que es mentira, cuando les diga que lo que tiene valor en la vida no se puede patentar.
Voy a lanzarme a ver si existo: sin perdón, sin excusas, sin permiso.
Mientras el otoño llega y las hojas se tornan amarillo, yo me torno carajillo y me bebo,