A lo mejor es bueno crearse una rutina de romper la rutina diaria y marearse en la noria. A lo mejor tenemos que ser fuertes
Esta disputa —que el lector disfruta— de la zorra con las uvas me enseña
Humano guarda secreto de sumario: llora por dentro.
Querido, “hubos” hubo muchos pero no fueron tuyos. Pero “ahoras” sólo hay uno y te pertenece.
Mientras el otoño llega y las hojas se tornan amarillo, yo me torno carajillo y me bebo,
Tu resultado, no el precio que has pagado, es lo que envidian.
El burdo burdel de El Llano ya no ofrece masajes a cuatro manos.
El cuerpo que te ha tocado es el resultado de una lotería que no has jugado.
Déjame que te cuente el lado oscuro del mercado: venderse a uno mismo está muy bien pagado.
Mientras tanto, el eco de aquel beso inesperado resonaba en mi cabeza.
No se echa en falta nada que sobra: como una mariposa que vuela a la pata coja.
Nunca fue fácil enfrentarse a lo frágil: pero aquí estamos.
No te dejes engañar: las sonrisas de verdad pueden atravesar hasta las mascarillas más opacas.
Las canas son sabiduría que se desborda.
¿Sin ganas de vivir? Vive sin ganas. Las ganas de vivir se ganan viviendo.