#poesía
Vístete fuego, viste té y hierba en el pelo: arriba el cielo, abajo el trigo
Las aceras siguen siendo ilegibles libros de pies cuyas páginas se revuelven al son del insomnio
Los que más nos esforzamos en esto del vivir, te lo digo como si pudiera verlo, hemos visto a alguien dejar de hacerlo.
Quien no tiene memoria necesita cicatrices. Quien no tiene historia necesita tatuajes.
Nunca fue fácil enfrentarse a lo frágil: pero aquí estamos.
Vístete de aire, de brisa y ven a verme.
Desde pequeñito crecí igualito que un camaleón: un ojo en el presente –que es buen… otro en el pasado –que fue mejor–.
El bus veinte va como si no quisiera llegar al final.
Cree en ti mismo: la creencia precede a la evidencia.
Desde que desperté, me dediqué a desear dibujarla despierta y desnuda: danzando decidida
Fuimos los perfectos políglotas: yo te hablaba en cristiano, tú me callabas en francés.
Viaja ligero si quieres llegar lejos: la felicidad.
Sol, gracias por levantarte todos los días e iluminar a los habitantes de la Tierra: ingratas hormigas que van a la car…
Querido, “hubos” hubo muchos pero no fueron tuyos. Pero “ahoras” sólo hay uno y te pertenece.
Pájaro nunca voló: le dijeron que no podía y se lo creyó.