Se oye un sepelio por los muertos por dentro: vida sin ganas.
Esta disputa —que el lector disfruta— de la zorra con las uvas me enseña
Tu resultado, no el precio que has pagado, es lo que envidian.
Al final podré perecer petrificado por perder un pulso de miradas
Del maestro más mordaz, siempre somos aprendiz: las lecciones vitales siempre dejan cicatriz.
Mientras tanto la gente intenta descubrir una forma de cubrir su carne desnuda que no se diluya
Mientras tanto, la gente intenta descubrir una forma de cubrir su carne desnuda que no se diluya
Después de muchas vueltas y algún que otro tropezón, te das cuenta: no es la cabeza quien recuerda, sino el corazón.
Déjame que te cuente el lado oscuro del mercado: venderse a uno mismo está muy bien pagado.
A lo mejor es bueno crearse una rutina de romper la rutina diaria y marearse en la noria. A lo mejor tenemos que ser fuertes
Hazlo o no lo hagas: no hay propósito alguno que te haga triunfar.
El prosaico patriotismo de la pila de platos sucios de la cocina no está patrocinado por ninguna puta compañía
Las aceras siguen siendo ilegibles libros de pies cuyas páginas se revuelven al son del insomnio
La procesión va por dentro, no por teatro.
Hazlo aunque llueva, porque llueva o no llueva, no se hace solo.